Cosmética

Bueno, podemos intuir qué es un producto de maquillaje. ¿Pero cuál es su definición oficial? 

Según la normativa europea, un producto cosmético se trata de toda sustancia o mezcla que se pone en contacto con partes superficiales del cuerpo humano como son epidermis, sistema piloso y capilar, uñas, labios y órganos genitales externos. Su objetivo consiste en limpiar, perfumar, modificar el aspecto, proteger, corregir los olores corporales o mantener estas partes en buen estado. 

Aunque no lo creamos, en productos cosméticos podemos incluir desde pintauñas, limpiadores faciales y desodorantes hasta colonias. 

La cosmética nos ofrece un mundo de posibilidades. En primer lugar, la cosmética cumple una función básica y necesaria para nuestro bienestar como es la de mantenernos limpios, protegernos y mantenernos en buen estado. 

No obstante, la cosmética posee otras propiedades que van más allá y nos ayudan a sentirnos ideales, bien con nosotros mismos. ¿Cómo? La cosmética nos ayuda a mejorar nuestro aspecto, mejorando la apariencia de nuestro pelo, de nuestra piel y rostro. Existen cosméticos que trabajan para mejorar nuestro aspecto a corto y largo plazo. También existen otros cosméticos como el maquillaje, que consiguen mejorar nuestro aspecto notablemente al instante y nos hacen ver genial en cuestión de minutos.

¿Eres nueva o nuevo en la rutina cosmética? ¡Bienvenido a este maravilloso mundo donde tu piel y tú ganáis! Sabemos que al empezar, puedes perderte entre tanta variedad de productos. Cada uno tiene su función, un formato distinto y una forma diferente de aplicación. 

Tranquila y tranquilo, te lo contamos todo para que te quede clarito. El primer imprescindible de la rutina skincare es el limpiador. Debes elegir aquel adecuado para tu tipo de piel. Si tienes la piel sensible, elige uno que no contenga perfume. Si tu piel es seca, decántate por un limpiador en aceite o crema pues hidratan tu piel mientras la limpian. Si tu piel es grasa o mixta, busca uno con zinc, ácido salícilico y no comedogénicos. Ayudan a reducir la grasa y a matificar. 

No obstante, recomendamos realizar una doble limpieza especialmente por la noche. Primero con un limpiador de base grasa, como puede ser leche o aceite y después con otro limpiador cuya base sea acuosa como el gel o el jabón. 

La crema hidratante es un básico en toda rutina cosmética pues ayuda a mantener la función barrera de la piel. Si tu piel es sensible, elige una crema hidratante hipoalergénica y que no incluya perfume. Si tu piel es mixta o grasa, busca geles o emulsiones y no comodedogénicos. Si tu piel es seca, te recomendamos usar aquellas cremas hidratantes que incluyan ceramida 3, ácido láctico, gluoglicerol o urea. 

Antes de la aplicación de la crema hidratante, resulta conveniente incluir un serum. El serum se trata de un producto con alta concentración de principios activos. Para pieles sensibles o secas elige un  sérum con activos hidratantes y calmantes. Si tu piel es grasa o mixta, decántate por aquellos que incluyen vitamina E y ácido ferúlico.

Un protector solar es imprescindible. Debemos usar uno que proteja de radiación UVA, UVB y si puede ser, que además proteja de la luz visible y los infrarrojos. En cuanto al factor de protección, recomendamos usar siempre SPF 50.

Si tu piel es sensible, utiliza filtros físicos y sin perfumes. Si tu piel es seca, elige cremas protectoras con texturas más grasas.Si tu piel es grasa, elige productos no comedogénicos, geles o emulsiones.

Estás en esa edad en la que no sabes si eres demasiado joven para comenzar a usar cosméticos o es ya hora de empezar a prestar más atención al cuidado de nuestra piel. 

Pues bien, esta pregunta no es tan sencilla de responder. No obstante, debemos tener en cuenta que la cosmética siempre nos va a hacer bien si elegimos los productos adecuados. Por lo tanto, nunca va a ser temprano para adentrarnos en este mundillo. 

No obstante, si debemos fijar una fecha, esta sería sobre los 16 años. Quizás esperabas que fuese una edad más alta pero si lo piensas, en la adolescencia es donde experimentamos un cambio hormonal y nuestra piel se ve afectada. Comienzan las rutinas de afeitado, la aparición del indeseado acné,...Para estos casos, existen cosméticos que pueden mejorar la situación en gran medida. Aquí es cuando ya se ve necesario el hecho de prestar más atención a nuestra piel. 

Sin embargo, como cuidado de la piel, podemos incluir los protectores solares, un producto que es de obligado uso desde que somos pequeños. Todo humano necesita protegerse del sol adecuadamente. 

Otro cosmético siempre imprescindible es la famosa crema hidratante pues es esencial para tener una piel sana y evitar el envejecimiento prematuro. Asimismo,  el limpiador es otro proudcto cosmético que debemos usar antes de los 20 ya que es la limpieza de la piel es un básico de la higiene personal. 

No obstante, hay ciertos cosméticos que se recomiendan usar a ciertas edades y con mucha razón. Un ejemplo claro es el contorno de ojos, el cuál recomendamos usar a partir de los 25. A partir de esta edad, hay que comenzar esta delicada zona, origen de ojeras, bolsas y temidas líneas de expresión. 

Los serums se recomiendan usar a partir de los 30 pues son ese plus de activos concentrados que la piel a esta edad va comenzando a necesitar. 

Y ahora…la populísima crema antiarrugas. ¿Cuándo es la edad a la que hay que usarla? La respuesta es a partir de los 35 años. A partir de esta edad, es más evidente la reducción de colágeno y elastina en nuestro sistema y aparecen las primeras arrugas. Sí, has leído bien, esas indeseables líneas de expresión que aparecen para quedarse en tu carita.

¿Y tú? ¿Sabes ya en qué punto te encuentras para usar productos cosméticos?